domingo, 27 de marzo de 2016

El Vicario de Marx


(Primera parte)


Por Amayrani Salazar

Desde que San Pedro se erigió como el primer Papa, la Iglesia Católica ha sufrido embates por varios frentes. Gobernantes, reyes y emperadores han buscado hacerse de ella y en no pocos casos, desaparecerla.

Pero en dos milenios de historia, jamás, la instauración de Jesucristo conoció un desafío tan grande como el que hoy encara en su propia cúpula. Cuando Martín Lutero impulsó la libre interpretación de la Biblia, una nueva línea dogmática se dio paso entre el catolicismo tradicional con nuevas formas y manejos, pero a fin de cuentas, terminó emancipada. Terminó creando una nueva iglesia.

La revolución luterana arremetió contra la institución, no contra la figura cristiana. Y aunque la liturgia de toda rama protestante adoptó sus propias cualidades, la doctrina continuó basándose en el pensamiento de Jesús de Nazaret.

Sin embargo, Jorge Mario Bergoglio (actualmente máxima guía espiritual del mundo católico) no secunda las palabras del hijo de María y José, sino de Henrietta y Herschel... Es decir, de Kissel Mordekay mejor conocido como Karl Marx.

Amar a los pobres resulta como enseñanza del Evangelio. Pero plantear soluciones contra el libre comercio y el respeto a la propiedad privada, deriva en COMUNISMO. Bergoglio pugna por la supresión del modelo económico de los países basados en mercado abierto e insta a una rebelión contra el capital. Sí, COMUNISMO.

El economista Arturo Damm hizo un apunte al respecto:

Las ideas del Papa Francisco respecto a la economía en general y al mercado en particular, están equivocadas. Ejemplo: en la exhortación apostólica Evangelii Gaudium (La alegría del Evangelio) del año 2013, el Papa arremete contra "el mercado libre, la globalización, el crecimiento económico y el consumo", asegurando que todo ello configura "una economía que mata" y por lo cual para evitar la matanza hay que acabar con el consumo, el crecimiento económico, la globalización y el mercado libre o por lo menos, acabar con la manera en que todo ello ha venido operando, lo cual supone sustituir al capitalismo por el comunismo (ni siquiera por socialismo, sino por comunismo) que en la visión del Papa Francisco no sería impuesto por la fuerza de las armas sino por la buena voluntad de los seres humanos. El problema es que impuesto por la fuerza o practicado voluntariamente, se trata de comunismo y el mismo, económicamente hablando, no funciona.

Bergoglio asegura que sus dichos obedecen a la Doctrina Social de la Iglesia, pero ésto es una falacia del tamaño de la Capilla Sixtina...

De acuerdo con el Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, "entre capital y trabajo debe existir complementariedad", no confrontación. Expone, además, que "el proceso productivo demuestra (...) la urgencia de dar vida a sistemas económicos en los que la antinomia entre capital y trabajo sea superada".

En otras palabras, la Doctrina Social de la Iglesia concibe la relación capital-trabajo como inevitable, favorable y necesaria.

Bergoglio, sin embargo, no alienta la creación de empleos ni anima a los sectores pobres de la población a valorar el trabajo o a buscarlo. No media entre el patrón y el empleado, LOS ENFRENTA. El pontífice argentino promueve la lucha de clases y aboga por la dictadura del proletariado. Marxismo en su estado puro.

Califica al sistema capitalista como "tiranía invisible" y pide a las personas adineradas que compartan su riqueza porque "ser pobre es dejarse enriquecer por la pobreza de Cristo". Y bajo tal razonamiento aduce que la gente pobre es gente buena.

Invoca regularmente a San Juan Crisóstomo y a San Ambrosio para justificar lo anterior aún cuando el primero aclaró que "Cristo no prohíbe enriquecerse, sino hacerse esclavo de las riquezas" [Catena Aurea, Vol. VI, P. 315] y el segundo explicó que "no todos los pobres son bienaventurados pues la pobreza de suyo es indiferente; puede haber pobres buenos y malos".

No obstante para el "Papa de los pobres" el número de bienes materiales determina la pureza del espíritu y la calidad humana. Y da a la pobreza un perpetuo sentido socioeconómico aunque en el mensaje de Jesús dicho tratamiento sea muy escaso.

Entonces, ¿qué predica Jorge Mario Bergoglio? Catolicismo no es. Cristianismo tampoco. Pero lo imparte como si fuese. Ahora resulta que, según Bergoglio, "los comunistas robaron a la Iglesia la bandera de los pobres". ¡Qué barbaridad! Stalin por lo tanto, quien dijo que "la humanidad se divide en pobres y ricos, poseedores y explotados", ¡¿era católico?! ¡Santa madre de Calcuta!

Bergoglio está deformando el dogma católico y lo está dinamitando desde adentro. Está tergiversando el concepto de pobreza al que los textos apostólicos se refieren y sobre todo, está inyectando criterios totalmente opuestos a este sistema de creencia.

No extraña pues, que líderes comunistas por todo el mundo simpaticen con él y lo respalden a muerte como Pablo Iglesias, el cabecilla de PODEMOS en España, o Alexis Tsipras, el presidente griego emanado de SYRIZA. O que ya en Sudamérica sea alabado por Nicolás Maduro, Rafael Correa, Evo Morales y en el Caribe sea arropado por los hermanos Castro.

Tampoco extraña que en México, Andrés Manuel López Obrador celebre las declaraciones vertidas durante su visita, cosa que no hizo con Benedicto XVI. ¿Por qué con Ratzinger no se embelesaron los dirigentes de izquierda contemporáneos ni los ateos declarados? Simple: Porque Bergoglio no disimula su inclinación política y no tiene empacho por favorecer con sus disursos a ciertos "activistas" quienes bajo el camuflaje de los movimientos sociales, apuestan al marxismo: filosofía madre de la reyerta comunista.

El llamado Papa Francisco se autodenomina feminista, ecologista, indigenista y mil "istas" más. ¿Pero se ha manifestado católico? No. ¿Se ha vanagloriado alguna vez de su catolicidad? Nunca. Los fieles católicos lo asumen así por antonomasia, o sea, por mera tradición e inercia. Pero en la práctica, los pronunciamientos del pontífice abonan a muchas veredas excepto al de la religión que, se supone, profesa.

Continuará...

















Fuentes:
- Francisco contra la tiranía del capitalismo:
http://www.altonivel.com.mx/39375-francisco-pide-acabar-con-tirania-del-capitalismo.html
- Artículo del economista Arturo Damm:
http://www.asuntoscapitales.com/articulo.asp?ida=7841
- Relación entre Capital y Trabajo según la Doctrina Social de la Iglesia:
http://www.vicariadepastoral.org.mx/8_compendio_doctrina_social/cdsi_10.htm#595
- Comunistas con Francisco:
--- Pablo Iglesias: http://noticias.lainformacion.com/espana/pablo-iglesias-utiliza-palabras-del-papa-francisco-para-arremeter-contra-el-neoliberalismo_4YP88icAzOmMhh2Lcrpct4/
--- Alexis Tsipras: http://www.lne.es/internacional/2015/07/13/papa-defiende-tsipras/1785864.html
--- Nicolás Maduro: http://www.eluniversal.com/nacional-y-politica/150925/maduro-considero-extraordinario-discurso-del-papa-en-la-onu
--- Rafael Correa: http://lat.wsj.com/articles/SB12591449784175704089704581090671356383388
--- Evo Morales: http://www.latercera.com/noticia/mundo/2015/07/678-638637-9-evo-morales-dice-temer-por-la-vida-del-papa-francisco-por-su-postura.shtml
--- Raúl Castro: http://infocatolica.com/?t=noticia&cod=23933
--- AMLO: http://www.eluniversal.com.mx/articulo/nacion/politica/2016/02/13/agrada-amlo-discurso-de-papa-en-palacio-nacional

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